autorretrato para una autobiografía no autorizada














-si mirás al cielo, te sonríe el gato de Alicia del País
-tiene que ser sábado hoy. hoy no podría ser otra noche
-llamala a Viernes
-no... está la esperanza de una borrachera tranquila. o una borrachera fingida, jugando a ser Oliveira o Medina, pero apenas alcanzando un débil Julián Seoane o un extraño Rocamadour de veinte y tantos años

inflando globos. toda la noche inflando globos, escuchando en francés y sin comprender las conversaciones de India Song o leyendo las de Crave, o escribiendo las de la violada con la azulada, las de la ciega con el hermano o escribiendo confesiones de miércoles en sábado. anhelando el cuerpo o despreciándolo en silencio, en el total silencio de las masturbación y el monitor iluminando y el televisor callado donde Vincent Gallo, o Godard en blanco y negro y otros gemidos de lejos, entre globos entre los lunáticos y todas las cosas que se escapan del insomnio














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